
Una comunidad para que los guerreros del cáncer compartan, se conecten y vivan los momentos de su lista de deseos.

Vivir con cáncer puede traer desafíos, pero eso no significa que debas poner tu vida en pausa. En Compañeros de Sueños, estamos aquí para ayudarte a vivir cada momento y hacer realidad tus sueños – juntos. Ya sea ver el amanecer en el Gran Cañón, aprender a bailar salsa o ir de viaje por carretera con nuevos amigos, estamos aquí para conectarte con otros que quieren acompañarte en la aventura de cumplir cada sueño de tu lista.

Compañeros de Sueños nació de la inspiración de un valiente paciente con cáncer de pulmón. Su diagnóstico le hizo reflexionar sobre el tiempo y las experiencias que deseaba vivir, pero había un obstáculo: era soltero, y sus amigos –con sus propias limitaciones de tiempo y presupuesto– no siempre podían acompañarlo en las aventuras que tanto anhelaba. Sin embargo, él no quería renunciar a sus sueños ni enfrentarlos en soledad. Buscaba compañía en personas que, como él, comprendieran la urgencia y el valor de aprovechar cada momento.

Esta plataforma fue creada para personas como él: guerreros contra el cáncer que, sin importar su diagnóstico, desean experimentar la vida plenamente, con todo el amor, la risa y la compañía que cada experiencia merece. Aquí, los pacientes pueden expresar sus deseos, conocer a otros que comparten su misma pasión por vivir, y juntos pueden planificar y emprender esos viajes, esas metas y esos momentos que hacen que la vida valga la pena.

Compañeros de Sueños no es solo una comunidad, sino un recordatorio de que el poder de los sueños es mayor cuando se comparten. A través de esta red, personas que enfrentan el cáncer pueden hacer amigos que entienden los desafíos únicos de su situación, y con quienes pueden construir recuerdos imborrables. Aquí, el valor de cada experiencia se magnifica porque es compartida y entendida por quienes también están en una carrera para aprovechar cada instante.
Este espacio está aquí para quienes buscan, por encima de todo, sentir que no están solos, que aún tienen sueños por vivir, y que, aunque su camino pueda ser desafiante, no tienen por qué recorrerlo sin compañía.